En poco más de una hora cubrimos los 80 kilómetros y llegamos a Zadar procedentes de Skradin por la autovía E56, casi toda en trayecto descendente hasta llegar a la costa. Zadar es una ciudad enclavada junto al mar con una historia excepcional y rico patrimonio cultural. La ciudad fue creándose alrededor del foro romano, dentro de las paredes fortificadas. Fue la más grande ciudad fortaleza de la República de Venecia, y nunca fue tomada por los turcos. ACTURALIZADO en 2018, ya que las fortificaciones venecianas de la ciudad de los siglo XIV al XVII fueron incluidas en el año 2017 en la Lista del Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco.
Una ciudad de antiguos monumentos croatas, llena de archivos, museos y bibliotecas, guardianes de legados y tesoros artísticos, literarios y musicales. Tiene la Universidad más antigua de Croacia fundada en el siglo XIV y puede decirse que la ciudad de Zadar es un monumento en sí. Está rodeada de murallas históricas, posee riquezas arqueológicas y monumentales de tiempos remotos, medievales, renacentistas y muchos logros arquitectónicos contemporáneos, tales como el primer órgano de mar en el mundo o el llamado "saludo al sol".
Dejamos aparcado el coche en la plaza de los cinco pozos, donde también se encuentra la Torre del Capitán, de forma pentagonal, que está integrada en los restos de la muralla almenada del siglo XIII y junto a ella la Puerta de Terraferma, uno de los mejores restos de la muralla veneciana. Justo enfrente se encuentra el parque municipal con los jardines públicos más antiguos del país que datan de 1890. Parece que se celebraba una fiesta infantil pues la ciudad estaba totalmente tomada por los escolares. Desde luego era festividad local ya que un gran número de familias acompañaban a sus hijos a la multitud de actividades lúdicas y deportivas que estaban programadas en cualquier rincón de la ciudad.
Nos dirigimos hacia la costa para observar el increíble color azul de sus aguas antes de visitar su centro histórico. De esta manera, en nuestro camino nos topamos con la Iglesia de San Donato con una estructura hecha con un diseño circular de estilo prerománico-bizantino construida en la parte superior del antiguo Foro Romano.
Un fabuloso edificio redondo monumental que data del siglo IX. Este complejo de Iglesia y Palacio Arzobispal ha sido incluido en la Lista Indicativa de la UNESCO por Croacia para llegar a ser Patrimonio de la Humanidad en 2005. Enfrente de la iglesia de San Donato y el Palacio Arzobispal, se encuentra el Forum Romano, una plaza de la época romana, construida entre el siglo I AC y el siglo III, y que es uno de los más importantes del Adriático. Una inscripción de piedra con el nombre de procónsul de Augustus, Tamfil Vaale, tallada en el pozo del Foro, da testimonio de que esta compleja construcción se inició ya en la segunda década del siglo I AC.
Esta bonita ciudad ha sabido combinar una rica oferta turística con la belleza del pasado y como resultado final, ofrece todos los privilegios que el viajero moderno demanda, de tal manera que hasta ganó el prestigioso título de mejor destino europeo para el año 2016 de la página de Internet dedicada a la promoción del turismo europeo, European Best Destinations, en competencia con otros 20 destinos de Europa. Llegamos al paseo junto al mar o como dicen ellos la Ribera de Zadar y desde luego el color de sus aguas es tal y como lo habíamos visto anteriormente en fotos, un azul intenso que no dejaba confundirse con el color del cielo. Y allí estaba el famoso Órgano del mar.
Se extiende por cerca de 70 metros a lo largo del margen de la costa y se compone de varias escaleras que se sumergen en el mar. Tiene 35 tubos de diferente longitud que fueron construidos en forma vertical y que se inclinan cuando llegan a la la parte pavimentada de la costa hasta terminar conectados en un canal situado a la altura donde la marea es más baja. Por encima del canal, hay perforaciones en las escaleras y en el pavimento de piedra del paseo, a través de los cuales sale el sonido, debido al aire empujado por las olas del mar. El órgano es capaz de interpretar 7 acordes de 5 tonos. Y damos fe de que se escucha. No es para salir extasiado, pero es del todo curioso.
C omo si de un auditorium se tratase, estuvimos allí contemplando el mar y su sonido durante varios minutos y el caso es que fue bastante placentero. Cerca de allí se encuentra el "Saludo al Sol" una obra de de arte de energía solar única en el mundo, que consta de trescientas placas de vidrio colocadas al mismo nivel de la línea del pavimento de piedra, en forma de círculo y con 22 metros de diámetro.
Durante el día, la instalación almacena la energía solar. Los módulos solares absorben la luz del sol, transformándola en energía eléctrica. Al llegar la noche la energía solar se utiliza para disponer en una pantalla de una luz increíble. Armonizados con el que dicen es "el más bello atardecer en el mundo" y ¡Ojo, esto lo dijo Alfred Hitchock! Los elementos de iluminación instalados en el círculo se encienden y con un escenario particularmente programado, producen una maravilloso y excepcional espectáculo de la luz al ritmo de las olas y los sonidos emitidos por el órgano del mar. ¡Impresionante!
Os dejamos una imagen sacada de Internet porque nosotros continuamos camino y no pudimos ver tanta belleza...
Así que ya sabéis, si vais a visitar esta ciudad, intentad pasar una noche allí para ver esta peculiar función y su maravilloso atardecer en la Ribera de Zadar.
Seguimos nuestro camino, esta vez hacia la Plaza del Pueblo y su Catedral. En esta ciudad, los espacios grandes se dejan para los peatones. El paseo por sus calles adoquinadas se convertirá en una agradable experiencia ya que uno puede pararse en cualquier rincón sin temor a ser atropellado. Al llegar a la plaza nos fijamos en su Catedral románica dedicada a Santa Anastasia, con un imponente campanario desde donde deben ofrecerse unas hermosas vistas. No pudimos subir porque en la Catedral se oficiaba misa y estaban de festejos.
Los orígenes de la Catedral de Santa Anastasia se remontan a una basílica cristiana construida en los siglos IV y V, se reformó en estilo románico durante los siglos XII y XIII y ha sido enviada a la Lista indicativa del Patrimonio Mundial de la UNESCO.
En el lado sur de la Plaza del Pueblo está la Logia de la Ciudad, mencionada por primera vez en el siglo XIII; fue reconstruida en el siglo XVI. Este edificio fue Palacio de justicia, Cámara del Consejo y Biblioteca de la ciudad. Fue restaurado después de haber sido gravemente dañado en la Segunda Guerra Mundial. Con sus grandes ventanales y techos altos, hoy en día sirve como un espacio de exhibición artística.
La Plaza del Pueblo es el centro de la vida pública en Zadar desde el Renacimiento hasta nuestros días. En esta magna platea, los cimientos de las instituciones municipales fueron puestos desde la alta Edad Media. En el lado norte de la plaza se encuentra la Guardia de la Ciudad, actual Ayuntamiento, diseñada por un arquitecto veneciano en claro estilo renacentista tardío. Mas tarde, en el siglo XIX se le añadió la gran torre central del reloj y una barrera de piedra que rodea al edificio con una barandilla con agujeros para los cañones.
Ya solo nos quedaba volver a nuestro coche y seguir con la ruta del día, nos dirigimos hacia fuera de la muralla a través de la Puerta de Mar, también conocida como Puerta de San Crisógono, debido a su proximidad a la iglesia del mismo nombre. Contiene partes de un antiguo arco de triunfo romano, renovado por los venecianos en 1573 para celebrar la victoria cristiana sobre los turcos en Lepanto.
Llegamos al aparcamiento y reanudamos la marcha hacia la población de Nin a unos 20Km de Zadar y donde encontraríamos más de una sorpresa.
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