Padua, Padova en italiano, es una ciudad de la región del Véneto, hoy es conocida por los peregrinos del mundo que vienen a conocer la Basílica de San Antonio y también por la cantidad de personajes célebres que habitaron en ella como Dante, Petrarca, Giotto, Donatello o Galileo Galilei, así como los que nacieron en ella con el gran arquitecto Andrea Palladio. Su universidad fue fundada en 1222 siendo la segunda universidad más antigua de Italia logró extender su fama por toda Europa, siendo hoy en día un gran centro universitario en el país, fundamentalmente en las ramas de ciencias: de hecho el Jardín Botánico(Orto Botánico) se encuentra en la Universidad de esta ciudad y fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1997 por ser el primero fundado en el mundo, lo conocí en una visita a la ciudad en el año 2006 y es un lugar bastante desconocido para la mayoría de visitantes.
Unos días antes de mi visita a Padua en agosto de 2021, como os he contado en Cinco fronteras, dos óperas y seis lugares Unesco: Ruta de un viaje de verano 2021, la ciudad se vestía de gala porque la Unesco bajo el epígrafe de Ciclos de frescos del siglo XIV de Padua nombra Patrimonio de la Humanidad a ocho lugares o edificios y otro tantos artistas, a saber el Oratorio de San Miguel, Oratorio de San Jorge, Palazzo de la Ragione, Capilla del Palacio Cararesi, Catedral y Baptisterio, Iglesia de los Eremitani, Basílica de San Antonio y la joya del conjunto que es la Capilla de los Scrovegni pintada por Giotto, de la que hablaremos más adelante. Dice la Unesco de este conjunto: " Esta propiedad se compone de ocho complejos de edificios religiosos y seculares, dentro de la histórica ciudad amurallada de Padua, que albergan una selección de ciclos de frescos pintados entre 1302 y 1397 por diferentes artistas para diferentes tipos de mecenas y dentro de edificios de diversas funciones. Sin embargo, los frescos mantienen una unidad de estilo y contenido".
Vamos ahora a recorrer esta ciudad italiana llena de serenidad y belleza que hasta ahora había sido considerada como de segunda clase por muchos pero que contiene, como le sucede a Rávena, un conjunto de lugares únicos, a los que hay que dedicarle al menos un día o dos de visita y además tiene el plus de encontrarse a tan solo 38 kilómetros de Venecia.
Seguramente llegues a Padua y tu primera visita sea Prato della Valle, ya que muy cerca hay un aparcamiento público. que es la mayor plaza de Italia. Su forma es elíptica y está formada por un canal de agua con dos anillos donde se encuentran 78 esculturas que bordean, una gran fuente central y cuatro puentes para poder cruzarla, está rodeada además de hermosos edificios y una inmensa iglesia dedicada a Santa Justina.
La Basílica de San Antonio, patrón de la ciudad, era el motivo casi único por el que muchos visitantes llegaban a Padua. En sí mismo, tanto el edificio que se comenzó a construir en estilo bizantino en el año 1232 para guardar los restos de San Antonio y durante siglos fue acumulando reformas y construcciones así como pintores y escultores que en ella intervinieron, la hacen una obra de arte y un magnífico lugar para conocer la evolución artística en Italia y en toda Europa, me atrevo a decir que es una obra maestra de arte en el mundo y desde el 24 de julio de 2021 incluida en la lista de la Unesco.
Aquí han intervenido pintores como Giotto que dejó sus primeros frescos entre los años 1302-1303 en las capillas dela Basílica y hoy dicen que fue su ensayo para su obra maestra de la que hablaremos más abajo, Donatello con una balaustrada con cuatro esculturas maravillosas de bronce en el Altar Mayor, esculturas y relieves contando los milagros del Santo y pinturas de Tiziano o Giotto, un sin fin de artistas que dejaron su impronta en ella.
En un lateral de la Basílica está la tumba de San Antonio, nacido en Lisboa en 1191 y fallecido en Padua en 1231, sorprende por las miles de ofrendas que tiene a su alrededor, la sala de las reliquias, esculturas, documentos sobre su vida así como las paredes blanquísimas con adornos de oro, mucho de estos elementos son renacentistas y barrocos.
En la plaza cercana a la Basílica se encuentra el Oratorio de San Jorge que no hubo tiempo para visitarlo y el Monumento ecuestre Gattamelata de Donatello. Lo levantó en Padua entre los años entre 1447 y 1453 y representa al condotiero, soldados mercenarios a sueldo, Erasmo de Narni, llamado el Gattamelata. Esta escultura ecuestre es una pieza casi única previa al renacimiento ya que las que se conservan son de jefes de estado o príncipes. Dicen que fue fuente de inspiración para Miguel Ángel.
Tras la comida continuamos ruta para visitar la Capilla de los Scroveni que cuenta con los frescos al temple pintados por Giotto entre 1303-1305, en pleno Trecento (Tardogótico-Protorrenacentista) un referente posterior para el Renacimiento, estábamos a punto de conocer una de las obras maestras de la pintura italiana. Se encuentra en la Plaza de los Eremitani en un complejo de edificios que hoy constituyen el Museo Cívico de Padua que visitaríamos después de la Capilla junto al Museo del Palacio Zuckermann; a la zona ubicada en un extremo de la ciudad también se la conoce como la Arena ya que los Srovegni, banqueros de la ciudad, comenzaron la construcción del palacio y de esta capilla en la que era la arena romana de la ciudad.
La capilla está dedicada a la Virgen, mandada construir Enrico Scrovegni para que fuera su lugar de enterramiento junto a su mujer y como penitencia de expiación para los pecados de su padre Reginaldo, banquero y usurero, tan despiadado que aparece en el Canto XVII del Infierno en su obra La Divina Comedia de Dante.
En el momento de nuestra visita el número de personas que acceden cada 30 minutos era de 15. Primero se accede a una sala para ver un vídeo en italiano con subtítulos en inglés de un documental sobre la historia de la capilla y los recientes intervenciones en las pinturas y en el propio edificio ya que después de derribar el Palacio de los Scrovegni se quitó una de las paredes adyacentes a la capilla y es muy sensible a las variaciones de temperatura. La puntualidad para iniciar la visita debe ser absoluta porque una vez que termina el vídeo, se abren las puertas de cristal que dan acceso a la capilla una sola vez en cada horario reservado para poder preservar la temperatura de ella.
Por fin pudimos entrar en la capilla y poner mucha atención porque en el interior solamente se puede estar 15 minutos. Me pareció curioso que nos dejaran hacer fotografías sin flas, la capilla no es demasiado grande con planta rectangular pero quedas absolutamente impresionada cuando encuentras ese espacio absolutamente cubierto. La vista del juico final es espectacular, como muestra la imagen que encabeza este relato. La temática, como no podía ser de otra manera, son secuencias del Antiguo y Nuevo Testamento, la secuencia de lectura de estas imágenes es de izquierda a derecha y de arriba abajo. Toda la secuencia y estructura de los frescos que vemos Giotto estuvo condicionado por la asimetría que le daban lo ventanales de una de las paredes, tomando como punto de referencia el espacio entre las dos ventanas, del que no podía prescindir y calculando como introducir las escenas.
Más que la descripción de las escenas que se desarrollan en la capilla, a mí me parece muy interesante el gusto por los colores brillantes y luminosos de Giotto sobre todo de los azules, rojos, verdes, blancos y los colores tierra, además de su preocupación por la tridimensionalidad del espacio, el volumen conseguido en los personajes y los gestos de cara y manos que dejan de ser hieráticos. Esto supuso una ruptura con los métodos utilizados hasta ahora en la pintura heredados del mundo bizantino, siendo Giotto el verdadero el nuevo maestro de estas técnicas y sobre todo el nuevo tratamiento del espacio. Esta capilla es la obra maestra de esta transformación artística.
Podéis comprar las entradas en la web de la Capella degli Scrovegni y hacedlo con tiempo porque sino será imposible visitarla y sería una pena absoluta y ¡es su visita una experiencia inolvidable!. Con la misma entrada se puede acceder el Museo Cívico con un claustro precioso y al Palacio Zuckermann con colecciones de Artes Aplicadas y Decorativas.
Muy contenta por la visita de la Capilla que no había podido conocer en mi visita anterior a Padua porque estaban haciendo unas pequeñas obras en el espacio del parque, seguimos el paseo por la ciudad que tiene mucho que ver. Pasamos por la Plaza de los Señores con su Palacio del Capitanio con su famosa Torre del Reloj con un reloj con los astros.
Siguiente parada en las hermosas plazas de la Fruta y de las Hierbas, con montones de café y restaurantes y los sábados hacen mercado. Aquí se encuentra el Palacio de Razón que fue construido en 1218 como sede de los tribunales de la ciudad, en el piso superior tiene un gran salón todo cubierto de frescos, por esto está incluido en los lugares nombrados Unesco.
Y lo que más me gustó es que toda la ciudad estaba engalanada con grandes carteles con reproducciones de pinturas por su reciente incorporación a la lista del Patrimonio de la Humanidad.
Continuamos con la Universidad de Padua en el Palacio del Bo, e el que tan solo pudimos visitar su claustro con frescos en el techo y todo tipo de escudos e insignias de los estudiantes. Ya estaban cerradas las salas donde se encuentra El Teatro Anatómico, la Sala de los Cuarenta donde impartió clases Galileo Galilei a finales del siglo XVI entre otras; no podemos olvidar que esta universidad se fundó en 1222 y es una de las más antiguas del mundo.
No podemos olvidar en famosísimo Café Pedrocchi fundado en 1831, donde hace honor a su café a la menta y hoy es un referente en la ciudad y caro, carísimo con un servicio de mediana calidad.
El tiempo se iba acabando y la tarde empezaba a caer, era la hora de dejar esta ciudad y continuar ruta, pero todavía queda espacio para algunos de los soportales que recorren la ciudad, sus casas color tierra o una hermosa imagen que forma uno de los ríos que pasan por la ciudad. Y mi recomendación, si os gusta la pintura es que le dediquéis al menos dos días a Padua porque tiene mucho que ver.
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