PLAYA DE LAS CATEDRALES, BASILICA DE SAN MARTIN DE MONDOÑEDO, CASTRO DE FOZOURO, SARGADELOS, VIVEIRO Y LUGO.
Amanecimos pronto y el día prometía ser, nuevamente, estupendo. Tras nuestro desayuno, programamos el GPS rumbo a nuestro primer destino, una de las joyas de la provincia de la costa lucense y una de las maravillas naturales de España, hablamos de la Playa de las Catedrales, que se ubica entre Ribadeo y el municipio de Foz. Es fácil llegar y hay un buen aparcamiento.
Su verdadero nombre es el de Playa de Aguas Santas pero se conoce por el de Playa de las catedrales porque sus acantilados tienen mucho parecido con los contrafuertes de las catedrales góticas. Lo más característico de esta playa son los arcos de piedra y las cuevas que se forman en las rocas de los acantilados por el efecto de la fuerza del agua y el viento.
Nosotros llegamos temprano, y había ya gente pero no demasiada. No coincidía con ninguna visita guiada, que las organiza la Xunta y también el Ayuntamiento de Ribadeo.
La monumentalidad del lugar nos impresionó muchísimo porque las formaciones parecen emerger petrificadas de la nada en medio de la arena, los arcos pueden llegar a medir los 30 metros de altura y su un grosor es bastante imponente al ponerse al lado. Por ello decidimos llamar a este viaje, turisteando entre catedrales de mar y de tierra.
En este enlace (https://ascatedrais.xunta.es/monatr/inicio?lang=es) es donde se tienen que hacer las reservas para acceder a la playa, en 2015 ha sido necesario hacerlo entre junio y septiembre. No estaría mal comprobarlo si vais a ir por si vuelve a cambiar la normativa. Otro factor fundamental para la visita es el horario de las Mareas, (http://playa-catedrales.com/mareas/), si hay marea alta solamente se puede ver la playa desde arriba, para poder disfrutarla y ver todas las formaciones esculpidas por la erosión del mar ha de ser con marea baja.
Nuestra siguiente parada fue en una Catedral de tierra, la Basílica de San Martiño de Mondoñedo, en el concello de Foz. Construida en los S. XI-XIII es Monumento Nacional y Bien de Interés Cultural. Es una joya del románico y para muchos está considerada como la catedral/iglesia más antigua de España, incluso hay quien dice que del sur de Europa (hay vestigios del S. VI) y en 2007 se catalogó como Basílica.
Con la invasión musulmana la antigua Britonia de los suevos fue arrasada, y no fue hasta el año 867 cuando el rey Alfonso III de Asturias decide que es el momento de restaurar la diócesis, pero esta vez en el enclave donde hoy podemos admirar el templo románico de San Martiño.
En el año 925 el obispo San Rosendo consagra la primera catedral de Mendunieto, convirtiéndose así en la más antigua de Hispania. San Martiño dejó de ser catedral en el siglo XII, trasladándose la diócesis a Mondoñedo, pero ha llegado hasta nosotros en bastante buen estado. Al exterior se aprecian claramente las tres naves, la planta basilical, y los tres ábsides. Se conservan algunos restos del templo prerrománico construido por San Rosendo en el siglo X, en los muros laterales, donde aún se aprecia una portada con arco de herradura y algunas columnas. Pero es el interior de San Martiño el que nos ofrece aspecto muy primitivo en la talla bellísima de los capiteles. Recientemente se han descubierto también unas valiosas pinturas murales en la capilla del ábside derecho, del siglo XII, que constituyen un conjunto único dentro de Galicia y que merecen un repaso tranquilo y detallado.
Pero como todo lugar cargado de historia, cultos romanos, celtas y cristianos, San Martiño románico que vemos hoy, con todos sus añadidos posteriores, fue levantado por el obispo Gonzalo y cuenta con su leyenda o milagro que ha llegado a nuestros días y es la siguiente:
“San Gonzalo debió ser un personaje de gran resolución y determinación en su época, pues se cuenta de él que obró el milagro de destruir la flota normanda que pretendía asolar estas costas. La leyenda cuenta que Gonzalo, de edad avanzada, condujo al pueblo a lo alto de un monte para alejarlo de los saqueadores; sin embargo, vencido por el cansancio, se veía obligado a parar cada poco tiempo, hincándose de rodillas en el suelo y orando mientras se apoyaba en la Cruz. Encomendándose a Dios, cada vez que repetía este gesto las naves enemigas eran engullidas por la furia del mar una tras otra. Cuando apenas quedaban unos pocos barcos desarmados, los dejó marchar para que diesen noticia de aquel terrible castigo y no volviesen en el futuro".
Este Milagro de las Naves se rememora cada año con una romería que se celebra a finales de mayo o principios de junio, donde las gentes de la región recuerdan la figura de Gonzalo, llamado el “Obispo Santo”. En el interior de la iglesia nos encontramos un gran libro que pedía firmas para incluir San Martiño en el listado del Patrimonio de la Humanidad, pero no pudimos firmar porque estaba lleno y no lo habían repuesto. Creemos que este templo anclado en los orígenes de la cristiandad se merecería ser un sitio UNESCO.
Si queréis más información técnica del románico del lugar os dejamos este enlace:
(http://www.arquivoltas.com/11-Galicia/01-Mondonedo.htm) que analiza todas y cada una de las piedras de esta basílica.
Si deseáis consultar cambios en el horario o pedir cita para grupos, se puede llamar al teléfono: 982 132 607. Los horarios que nosotros encontramos:
Horario de Semana Santa Días Horario de mañana Horario de tarde De martes a sábado de 11h a 14h De 16h a 20h Domingo de 10h a 15h Horario de verano (de 15 de xuño a 15 de setembro) Días Horario de mañana Horario de tarde de martes a sábado de 11h a 14h De 16h a 20h Domingo de 10h a 15h Horario de invierno Días Horario de mañana Horario de tarde De miércoles a domingo de 12h a 14h De 18h a 20h
Para visitar el Museo, horarios y visitas guiadas en los teléfonos 620623592 y 982 132 426 (Oficina de turismo).
Nuestra siguiente parada camino de Viveiro fue el Castro de Fazouro. No se puede precisar con exactitud el momento inicial del asentamiento, pero por las tipologías que se conservan está datado entre los siglos I y II d.C. Está enclavado en la parroquia de Fazouro, pegado a la bajada este de la playa de Arealonga.
Concretamente en el lugar llamado “Punta do Castro” una pequeña península que se adentra en el mar, sobre una zona acantilada.
Aunque existen más castros, este es el único que se encuentra excavado y que se puede visitar libremente. Las vistas desde aquí de la costa son absolutamente preciosas y uno piensa que en la antigüedad sabían elegir muy bien los lugares para habitar.
Seguimos hacia Viveiro pero al ver un desvío hacia Sargadelos no pudimos evitar tomarlo y dar un paseo por el pequeño pueblo y admirar la fábrica de la famosísima cerámica, eso sí desde el exterior ya que era domingo y estaba todo cerrado. Llegamos a Viveiro y nuestra primera tarea fue encontrar un lugar para comer.
Viveiro es municipio situado en la costa cantábrica gallega, es la capital turística del litoral de Lugo, llamada la Mariña. Aquí desemboca el río Landro que se fusiona con el mar formando la ría de mayor tamaño del Cantábrico. Su principal fuente de ingresos es una importante industria pesquera, localizada principalmente en la vecina localidad de Celeiro, la transformación de madera y en menor medida el turismo.
Un poco de historia Aunque abundantes yacimientos arqueológicos y testimonios históricos hablan a las claras de la importancia que alcanzaron los asentamientos celtas y romanos, no sería hasta los siglos XII y XIII cuando se configure propiamente la villa de Viveiro, tal como la entendemos en la actualidad. El desarrollo económico experimentado en esta época se prolongó a lo largo de los siglos XIV y XV, quedando acreditada su pujanza por el carácter gremial de algunas de sus más antiguas calles ¬da pilitaria o da zapatería¬ por ejemplo, que revela el característico perfil social y económico de las mejores poblaciones medievales. Perduran, por ejemplo, algunas de sus grandes casas, de sus armerías esculpidas sobre piedra y, en especial, alguna de sus obras pías y fundaciones religosas, como el convento de la Concepción, que dotó y fundó Doña María de las Alas Pumariño (+1601), o la capilla del Ecce Homo, llamada también de La Misericordia, que fue levantada a expensas de D. Rodrigo Alonso Alfeirán (+1608).
Llegamos a la Playa de Covas, la playa de Viveiro, propiamente dicha, se halla al fondo del estuario vivariense, siendo la más célebre, importante y concurrida del municipio y, posiblemente del cantábrico gallego, con casi 2 km de longitud y oscilando de anchura entre 150 y 30m según la marea. Paralelo discurre un amplio paseo marítimo que fuimos recorriendo y preguntando hasta que encontramos un mesón que sació nuestra hambre.
Desde aquí en coche nos fuimos a visitar el casco antiguo y atravesamos el famoso puente de la Misericordia, que te otorga unas vistas maravillosas de la ciudad, es conocido también como Puente Mayor, fue construido sobre la ría de Viveiro en el S. XV, bajo el reinado de Enrique IV. Se cree que pudo haber sido levantado sobre uno anterior de época romana. Hoy en día, debido a numerosas remodelaciones sufridas a lo largo de los años, tres de sus doce arcos iniciales permanecen soterrados por la construcción del malecón y, posteriormente, del muelle y jardines.
El Casco antiguo Se trata de una localidad con restos de una antigua muralla medieval que la protegía de ataques de piratas en el siglo XVI y de la que aún quedan tres puertas de la época. La puerta de Carlos V, también conocida como Porta Mayor o Porta do Castelo es la más importante de las tres y en cierto modo símbolo de la ciudad. En 1942 fue declarada Monumento Nacional.
Las puertas dan entrada al casco histórico de Viveiro, un compendio de edificios de varios siglos de antigüedad entre los que destacan la iglesia románica de Santa María (S.XII), la iglesia y convento de San Francisco (S.XII-XIII), declarados Conjunto Histórico Artístico.
Aquí os dejamos un mapa de la parte amurallada de la ciudad y certificamos que se le puede dedicar un día completo porque tiene muchas cosas que ver. Nosotros hicimos un recorrido exterior del casco antiguo porque era domingo y estaba prácticamente todo cerrado.
1 Convento Concepcionistas-Gruta de Lourdes 8 Puerta de Carlos V 2 Iglesia de Sta. María del Campo 9 Porta da Vila 3 Iglesia de San Francisco 10 Placiña da Herba 4 Colegio Insigne María Sarmiento 11 Porta do Valado 5 Puente de la Misericordia 12 Callejón del Muro 6 Casa de los Leones 13 Convento de Valdeflores 7 Plaza Mayor 14 Capilla del Ecce-Homo
Puerta de Carlos V También denominada Castillo del Puente por su aspecto de fortaleza, tiene su origen en otra más antigua del S.XIII, que debido a la acción erosiva de las mareas y de los avatares históricos (ataques, incendios,…) se fue deteriorando, y en el S. XVI, más concretamente en 1548, se construyó la actual puerta, como homenaje al Emperador Carlos I de España y V de Alemania.
La actual puerta es de estilo renacentista¬plateresco y consta de tres cuerpos bien diferenciados, donde destacan motivos del escudo de la ciudad. En la parte posterior de la puerta, hay una imagen de S. Roque que sustituyó a otra de la Virgen de los Desamparados, pues se cree que fue este santo quien libró a la villa de la peste bubónica. Está declarada Monumento Histórico Artístico Nacional.
En el Convento de las Concepcionistas hay una reproducción a escala de la auténtica gruta francesa de Lourdes, famoso centro de peregrinación cristiana. Es un lugar donde es habitual ver gran cantidad de velas encendidas a modo de ofrenda por parte de los habitantes de Viveiro.
Iglesia de Sta. María del Campo Iglesia románica de la segunda mitad del siglo XII .Es una de las más puras y completas iglesias urbanas de Galicia. Su ábside es semicircular con tramos rectangulares, separados por columnas entre las que se abren 3 artísticas ventanas. La Plaza Mayor, centro neurálgico de la ciudad. En esta plaza estaba enclavada la desaparecida iglesia de Santiago. Está presidida por la figura de Nicomedes Pastor Díaz; escritor y político local, considerado uno de los mejores poetas del S. XIX. Entre los edificios más representativos se encuentra la Casa Consistorial coronada por un artístico reloj de sol. La Casa de la Farmacia, de la esquina, fue hasta el S. XIX la antigua Casa Rectoral de Santiago, como deja constancia la cruz sobre el tejado, y enfrente está el "Canto de Santiago" en recuerdo al lugar donde estuvo ubicado el templo.
Volvimos al coche y emprendimos ruta hacia Lugo, nuestro próximo destino; teníamos por delante unos 100km y a pesar de ser domingo no encontramos mucho tráfico y en una hora más o menos estábamos en las afueras de la ciudad. No veíamos la muralla por ningún lado, el GPS nos guiaba, subimos una cuesta tremenda y allí estaba, imponente la Muralla Romana de Lugo, Patrimonio de la Humanidad, UNESCO desde el año 2000 y como dato curioso hermanada desde el 2007 con la Gran Muralla china de Qinhuangdao.
Nos encontramos casi todos los accesos al interior de la ciudad cerrados o con circulación restringida y nuestro hotel estaba en el centro, al lado de la Plaza Mayor. Decidimos saltarnos uno de los accesos y aparcamos en un parking muy cerca del hotel (todo el centro es prácticamente peatonal). El tan mencionado hotel fue el Méndez Núñez, con desayuno 70 euros. Nos dieron una habitación en la quinta planta con unas vistas preciosas. También tenían un acuerdo con el parking que habíamos dejado el coche y en vez de 15 euros por día pagamos 6 por las 24 horas. Descansamos un poquito y salimos a dar un paseo y buscar las dos calles que nos habían dicho que estaban llenas de bares y restaurantes. Nuestro primer encuentro fue con la Plaza Mayor, conocida también como plaza de España de Lugo, se encuentra en el lugar donde solía celebrarse, en la época medieval, el antiguo mercado.
Como todas las plazas de mercado de la época, esta fue creciendo con el tiempo hasta convertirse en la plaza mayor que hoy es. En 1738 se construyó el edificio del Ayuntamiento siguiendo un diseño barroco de Ferro Caaveiro con dos torres que acompañan decoradas por los respectivos escudos de la ciudad. La torre del reloj se incorporó en 1871. El edificio del Ayuntamiento preside la Plaza y cuenta con dos pisos que dan acceso a un porche.
En 1914 fue quitada la fuente que por entonces presidía la plaza para construir jardines; además, se destruyo su pilón y su pedestal, colocándose la escultura alegórica de España en la entrada y los cuatro leones que arrojan en las escalera, que aún pueden disfrutarse. De la antigua plaza aún pueden observarse casas y soportales y el viejo kiosco de música, que antes ocupaba el centro y luego fue colocado a un costado. Hoy, la plaza es una planta rectangular que ocupa unos ciento veinte metros decorados por hermosos jardines a cuyo lado oeste podemos encontrar una alameda y en norte una acera que recibe el nombre de Cantón. Seguimos hacia la Plaza de Santa María y nos topamos con la catedral.
La Catedral Románica de Santa María en Lugo fue comenzada en el año 1129 sustituyendo a una anterior mandada edificar por el obispo Odoario en el siglo VIII.
La construcción de la Catedral de Lugo duro más de un siglo, siendo este el motivo por el cual tiene esa gran mezcla de estilos románico, gótico, barroco, renacentista y neoclásico. El maestro Raimundo de Monforte inició unas obras que duraron desde el año 1129 al 1273. . El proyecto románico inicial del Maestro Raimundo era un edificio de tres naves, crucero y cabecera con tres ábsides.
El edificio actual tiene una estructura en planta de cruz latina con tres naves, crucero y girola con cinco capillas absidales. En el lado izquierdo de la entrada a la catedral se encuentra la Torre Vieja, gótica, rematada por un cuerpo de campanas renacentista, terminado por Gaspar de Arce en el año 1580. Destaca el tímpano románico de la puerta norte presidido por un Cristo Majestad del siglo XIII. En el interior destaca la capilla de la Virgen de los Ojos Grandes (construida en el siglo XVIII por Fernando de Casas Novoa) en la que destaca el baldaquín de estilo churrigueresco, obra de Miguel de Romay y el coro de muy buena factura barroca, así como el deambulatorio del siglo XIV.
La fachada principal actual, de estilo neoclásico, data de 1769 y fue diseñada por Julián Sánchez Bort. La catedral posee el privilegio papal de exposición permanente del Santísimo Sacramento, en la Capilla Mayor desde la segunda mitad del siglo XVIII. Este hecho hace que se denomine a Lugo como la ciudad del Sacramento. Desde 1896 presenta rango de Basílica y alberga el Museo Diocesano En este enlace de la diócesis de Lugo podéis encontrar toda la historia de este templo
Horarios Todos los días, de 8:00h a 20:30h. y es gratuita.
Al salir de la catedral por su fachada principal, nos topamos de nuevo con la muralla pero dejamos su visita para el día siguiente. Llevábamos muchas horas de ruta y el cansancio estaba haciéndose notar. Cenamos en una de las tascas de la Rúa Nova. El tiempo seguía buenísimo y la luz de la luna llena nos acompañó hasta al hotel a estrenar la cama. Mañana más.