Nuestro último día en Tailandia, se lo íbamos a dedicar a la ciudad de Ayutthaya, en la que se encuentran los restos de la que fuera, durante cuatrocientos años, la antigua capital del Reino de Siam. Pasaron por ella 35 reyes, entre 1350 y 1767, año en la que fue destruida por los ejércitos birmanos.
Ayutthaya llegó a tener más de un millón de habitantes y se convirtió en un centro de referencia para el comercio entre occidente y oriente. Muchos de estos mercantes afirmaban que Ayutthaya era una de las ciudades más espléndidas del mundo. Y no debían exagerar porque los restos que hoy quedan son impresionantes, tanto que fue declarado su parque arqueológico Patrimonio de la Humanidad en 1991
Cuando decidimos dedicar nuestro tercer día en Bangkok a visitar esta ciudad, que está a unos 80 km, había que decidir cómo hacerlo: en tren, autobuses, minivans, barco. Una vez allí, al ser el parque arqueológico enorme y los monumentos muy dispersos, había que negociar un tuktuk para unas tres o cuatro horas, comer, ver el mercado flotante, etc. En esto estábamos cuando encontramos una excursión en la web de Mundo Nómada, que nos atrajo muchísimo ya que se iba en Bus y la vuelta era en Barco por el río Chao Phraya. El precio 55 euros por persona, el único inconveniente es que el guía era en inglés y nosotros no manejamos la conversación fluida.
Leímos el magnífico artículo del Diario de un Mentiroso sobre Ayutthaya y su valoración económica sobre el día pasado en la ciudad y nos decidimos a realizar la reserva con Mundo Nómada. Una vez pagada, nos encontramos con que no la realizaban ellos sino la empresa tailandesa Grand Pearl.
A las 7, 15h nos recogieron en nuestro hotel y nos llevaron a un Centro Comercial muy cercano donde a las 7,30h saldría nuestro bus a Ayutthaya. Puntuales salimos y el grupo era de unas 25 personas. El guía empezó sus discursos y no paró hasta la vuelta a Bangkok a las 16,30h y claro, siempre en inglés.
Llegamos al Palacio Real Bang Pa- In sobre las nueve de la mañana. El viaje comodísimo y fresquito. El Bang Pa-In o palacio de verano fue construido en el siglo XVII por el Rey Prasat Thong y revivido por Rama IV y Rama V en la segunda mitad del siglo XIX.
Consta de una colección de edificios de distintas épocas y diferentes estilos arquitectónicos y está rodeado por un lago y unos jardines exquisitamente cuidados. Solamente se pueden visitar dos edificios, uno de estilo chino diseñado para época de lluvias y una torre observatorio con terrazas para disfrutar de las vistas de los jardines.
La visita fue bonita, aunque un poco larga. Estuvimos una hora y media y con una hora hubiera sido suficiente. Salimos a las 10,30h y al subirnos al bus nos dieron una botella de agua muy fría que nos sentó de maravilla. Seguimos en dirección a la ciudad de Ayuthayya y por el camino se veían constantemente restos de templos. Las instrucciones que nos recuerdan todo lo que no se puede hacer cuando llegamos al parque Arqueológico lo vemos en la próxima fotografía y en la siguiente el precio del acceso.
Nuestra primera parada fue en Wat Maha That o templo de la gran reliquia, el monasterio real que sirvió como residencia del monje supremo.
Lo primero que llama la atención es la cabeza de Buda atrapada en las ramas de una higuera; hay unos carteles y una señora (creemos que vigilante) indicando que debes fotografiarte por debajo de la cabeza.
La escultura de la cabeza de Buda ha sido rodeada de manera natural por las ramas del árbol, creando una estampa única, probablemente de las más famosas de toda Tailandia. El árbol y la escultura están rodeados por una cuerda que crea un perímetro de seguridad y el famoso buda, está protegido en todo momento por un vigilante sentado junto al árbol. Como respeto hacia el buda y como bien indican los carteles, se considera una cortesía arrodillarse ante el buda para mostrar nuestros respetos.
No se sabe con certeza como la cabeza de Buda llegó a entrelazarse de esa manera. Se dice que simplemente el árbol creció durante el periodo que el lugar estaba abandonado, y hay quien dice que alguien movió la cabeza de Buda hasta ese lugar para esconderla ya que era un sitio muy visitado por caza-tesoros. Así pues, quien quiso ocultar la cabeza nunca volvió a recogerla.
Este es uno de los templos más importantes del recinto arqueológico por su cercanía al Palacio Real y por contener las reliquias de Buda consagradas. Una gran torre en forma de aguja es el edificio principal. Este templo tiene la particularidad de adoptar el estilo jemer típico de Camboya.
Nuestra siguiente parada fue en Wat Phrasisanphet , el mayor y más importante templo de Ayutthaya ya que se encontraba en el mismo Palacio Real del Reino de Siam. Data de 1448.
Era un templo real del reino del Ayutthaya que se usaba para importantes ceremonias reales como los juramentos de lealtad, además de servir como capilla privada de la familia real y el lugar donde se conservan sus cenizas y destacan tres chedis, especies de estupas que contenían las cenizas de tres reyes.
En este templo no residían monjes, aunque eran invitados ocasionalmente para la realización de ciertos ritos. Esta zona de la antigua Ayutthaya fue brutalmente devastado por los ejércitos Birmanos y a día de hoy, el estado es ruinoso. Todavía pueden apreciarse las estatuas de buda decapitadas. Seguimos el recorrido hasta Wihan Phra Mongkhon Bophit, es un templo importante dentro de Ayutthaya y se cree que se construyó alrededor del año 1538 durante el reinado del rey Chairachathirat.
Lo más característico del templo es su enorme estatua de Buda, la cual se encontraba anteriormente al aire libre. El templo también es un edificio impresionante y albarga el enorme buda.
Cuando el ejército birmano destruyó Ayutthaya este templo se dañó seriamente por el fuego, y no sería restaurado hasta principios del siglo XX, con el reinado del rey Rama VI. Se dice que con la restauración no se pudo conseguir la belleza que tenía originariamente, ya que los trabajos de los antiguos artesanos eran excepcionales. En ese momento se encontraron gran cantidad de imágenes de Buda, las cuales se guardaron en el Museo Nacional Chao Sam Phraya. En la década de 1960 se llevó a cabo un importante trabajo de restauración y se construyó un nuevo viharn o santuario, según el diseño del original, para poder albergar al Buda. Más tarde se cubriría la estatua con pan de oro.
Si alguien estuviera muy interesado en recorrer todos o parte de los cientos de templos que alberga esta ciudad, que no deje de visitar la web: http://www.ayutthaya-history.com/Temples_Ruins.html donde se enumeran y se describen uno a uno todos los templos de Ayutthaya.
A las 13h nos recogieron de nuevo y de vuelta al autobús nos llevaron a Nonthaburi, situado en una cuenca fértil en la orilla del Chao Phraya, en donde se intercalan plantaciones de frutas y flores con una gran cantidad de templos. Se encuentra a unos 20 km de Bangkok, y en el embarcadero de Wat Chong Iom para subirnos al Perla Gran Crucero. Estaba genial el barco, la comida que nos dieron, tipo buffet, muy rica y las vistas de ambas orillas del río espectaculares. Llegamos a Bangkok a las 16,30h muy contentos con la elección de esta excursión.
Todo fue perfecto, con mucha calidad y muy cómoda. Si hubiera que poner alguna pega, nosotros quitaríamos 30 minutos del Palacio Real y añadiríamos algún templo más como el del gran Buda reclinado del complejo Wat Yai Chaya Mongkol en Ayutthaya esculpido en cemento.
Las imágenes que se fueron sucediendo a lo largo del recorrido fueron sencillamente espectaculares, lo que nos ratificaba que nuestra decisión había sido muy acertada.
A las cinco de la tarde estábamos en el hotel, cansados, ese día hizo mucho calor. Decidimos que dábamos por terminadas las visitas, recogimos el equipaje que nos habían guardado y nos llamaron a un taxi desde el hotel. Nada de taxímetro y nos pidieron 450 Bhats (11,50 €) por llevarnos al aeropuerto de Don Muang. Por la hora y la distancia, aceptamos. El trayecto fue tedioso por la gran cantidad de tráfico, aunque nos permitió comprobar la extensión inmensa de Bangkok. Una ciudad con la perfecta mezcla de modernidad y tradición. Tardamos casi 2 horas en llegar al Hotel Amari Don Muang, donde íbamos a pasar la noche.
Este hotel está comunicado con el aeropuerto por una pasarela y hace que en cinco minutos estés en la terminal de facturación, nuestro vuelo a Bali con Air Asia salía a las 6,15h. Hicimos el Chek in y el chek out a la vez, nos dieron una habitación enorme con una cama grandísima y muy cómoda. Totalmente recomendable para vuelos tempranos o llegadas nocturnas.
El precio de la habitación no superó los 50 €. Dejamos las maletas y fuimos a investigar los accesos al aeropuerto y las terminales. Compramos cena y en la habitación hicimos el picnic. A las nueve a dormir que el despertador sonaría a las cuatro de la mañana. Quedarnos en este hotel nos permitió dormir casi 6 horas, si nos hubiéramos quedado en la ciudad habríamos pagado una habitación para no poder dormir nada y sin estar seguro de a qué hora salir debido al caos circulatorio de la ciudad.
Si hay que hacer una valoración de las tres días, bueno dos, que hemos pasado en Bangkok es que es una ciudad apasionante, atractiva, viva, una ciudad a la que hay que volver para descubrirla más despacio .
Esperamos que un futuro no muy lejano podamos otra vez "turistear" esta gran ciudad y ver todo lo que nos quedo pendiente ya que nos ha sorprendido gratamente y nos hemos quedado con las ganas de ver varias cosas, pero os dejamos la relación de nuestros sitios que por cuestión de tiempo no llegamos a ver por si queréis visitarlos:
- Pasear más por Silom Street.
- Conocer el mercado el Mercado de Chatuchak. (Tendremos que estar en Domingo en la ciudad)
- Visitar Wat Benchamabophit: El templo de mármol.
- Visitar Wat Arun: El templo del Amanecer.
- Wat Saket, Wat Traimit, y un largo etc. de templos
- Conocer algún mercado flotante
- Pasear, sin más, observando lo que te rodea.
Podéis ver nuestro video de la excursión a Ayutthaya en nuestro VIDEO
SI TENIÁIS DUDAS SOBRE BANGKOK... ¡DISIPARLAS, ES UNA CIUDAD QUE OS ENAMORARÁ! Y para convenceros totalmente podéis leer nuestros relatos de esta hermosa ciudad, Qué ver, qué hacer y qué visitar en Bangkok I y Apasionante día en Bangkok II. Todo el relato de nuestro viaje por Qatar, Tailandia, Indonesia y Singapur lo podéis encontrar en Viaje al sudeste asiático.