En esta ocasión madrugamos un poco más, el recorrido iba a ser mayor, queríamos visitar la ciudad de Solo o Surakarta, Sangiran donde se encuentra el Museo del hombre de Java, y a los Templos de Candi Cetho y Candi Sukuk en las laderas del Volcán dormido.
Salimos a las 07:30 h. Las carreteras sin ser malas, son muy lentas y hay que ir despacio y se encuentra tremendamente transitada por coches y motos. El trayecto hasta Solo tiene doble carril pero la circulación no pasa de 60 km. No paramos en Solo, pero sus calles, aunque más amplias que en Yogyakarta no daban abasto con el tráfico. Nonen ya nos advirtió que esta ciudad no nos daría tiempo a visitarla, nosotros pensamos que tal vez a la vuelta podríamos hacer una paradita. A pesar de que eran 80 km. tardamos más de dos horas y media, pero por fin pudimos atravesar su peculiar puerta de entrada y aparcar en el recinto.
Estiramos las piernas recorriendo y haciendo fotos del exterior del museo. Nonen nos indicaba en que parte se hacían las excavaciones arqueológicas. Este yacimiento de fósiles, junto a otros dos más, ocupan una extensión de 48 por 15 km cuadrados, en el valle del río Bengawan , está declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1996.
Las razones que esgrime son: “Una campaña de excavaciones llevada a cabo entre 1936 y 1941 condujo al descubrimiento de un primer fósil de homínido en este yacimiento. En excavaciones posteriores se exhumaron cincuenta fósiles de meganthropus palaeo y pithecanthropus erectus/homo erectus, es decir, la mitad de los fósiles de homínidos encontrado hasta hoy en el mundo. Habitado desde hace un millón y medio de años, el sitio de Sangiran es de importancia fundamental para comprender la evolución del ser humano.”
El edificio cubre una superficie de 17.000 metros cuadrados, está dividido en varias salas, incluyendo la sala principal de exposiciones, espacio de laboratorio, salas de reuniones, pantalla subterránea, sala audiovisual y fósiles de espacio de almacenamiento.
Arquitectónicamente tiene forma de cono con acceso desde el exterior mediante rampas techadas alrededor del edificio. Es del año 1998 y está bastante bien diseñado excepto los servicios públicos (WC) que son denigrantes para un museo como éste. La historia del Hombre de Java empieza hace más de un siglo. En 1890, un médico militar holandés y paleontólogo Eugene Dubois descubrió una mandíbula fosilizada de primate en una ribera del río Solo. El hueso poseía características inequívocamente humanas. Dubois estaba convencido de que se trataba de “eslabón perdido” de Darwin en la evolución del hombre, pero carecía de la evidencia para probar su teoría.
Más tarde, en 1939 el paleontólogo alemán Von Koenigswald, descubrió un fósil... la mandíbula del Homo erectus en Sangiran. Este era un fósil aún más antiguo, data de más de un millón de años o más, al que llamó “Hombre de Java". Este resto tenía más de un millón de años de antigüedad. Esto supuso que Dubois estaba en lo cierto. El Hombre de Java fue la prueba que había necesitado que el Homo erectus en Java existía antes incluso que en África.
Hoy en día, los científicos reconocen que el Homo erectus, que habitaron la tierra entre 1,7 millones y 250.000 años atrás, son los antepasados directos del Homo sapiens (seres humanos modernos). Se cree que el hombre de Java, probablemente hizo su hogar en las cuevas o en campamentos abiertos y lo más probable es que él fue el primer humanoide que se utiliza el fuego. También utilizó hachas de piedra y la mano de azuelas, la mayoría de los cuales fueron descubiertos por el río cerca de Baksoka Pacitan.
Pasamos al museo acompañados de Nonen, que todo hay que decirlo vino muy bien preparado para darnos las explicaciones arqueológicas y antropológicas de lo que íbamos a ver. Sobre todo porque la mayoría de las explicaciones estaban en indonesio.En el museo hay representaciones de cómo los hombres prehistóricos pudieron haber vivido miles de años atrás. Los fósiles de conchas y huesos de animales que se exhiben aquí oscilan entre 1,2 millones y 500.000 años de edad. También se exhibe un enorme colmillo de Stegodon de cuatro metros.
En el museo se puede ver réplicas de los fósiles originales del hombre de Java. Zonas didácticas donde se explica la evolución de los continentes y la evolución humana. Y además una sorpresa, se llama Lucy y es otro eslabón perdido de la especie humana, vivió en Sumatra hace más 500.000 años medía solo 1,10 m. y todavía no se ha dado respuesta a su origen y a su evolución. Nos quedamos sorprendidos porque recordábamos una Lucy africana llamada " La madre de la Humanidad"
Magnífica visita al museo al que hay que agradecer que dejen hacer fotos y videos y nuestra enhorabuena a las representaciones y a la iluminación. Acogedor, didáctico, entretenido y bonito. Único fallo, repetimos... ¡Renueven los WC, da vergüenza! Continuamos viaje hacia el interior de la isla viendo campos de arrozales preciosos con un verde esmeralda espectacular, es increíble la fertilidad de esta isla debido a su actividad volcánica.
Nos dirigíamos hacia la región de Karanganyar, en Java Central, y empezamos a subir por la ladera de la montaña Lawu por una carretera sinuosa hasta llegar a la altura de 1.800 metros sobre el nivel del mar. Para Yanto un 10 en la conducción. Llegamos a la cumbre y hacemos una parada para contemplar los inmensos campos de té. Otro espectáculo grandioso, pero a la vez triste viendo en las condiciones que trabajan los campesinos de todas las edades incluso ancianos, subiendo y bajando cuestas empinadísimas, trabajando en terrazas súper estrechas, sin ninguna protección en las manos y cargando en cestas enormes el producto recolectado.
Un auténtico vergel a nuestro alrededor y de pronto el Templo Hindú Candi Cetho, un templo del siglo XIV dedicado a la fertilidad con mucha semejanza a los templos balineses. Se construyó en la ladera del volcán dormido, así pues hay una gran pendiente y cientos de escalones que había que subir. La entrada, 20.000 rupias (1,7€).
Y allá que fuimos, poco a poco subiendo las distintas terrazas, tiene 14 niveles aunque hasta ahora solamente se han restaurado 9,. Subimos al Templo escuchando las explicaciones de Nonen sobre las estatuas y las puertas y de los falos de piedra que se disponían sobre el suelo, que representan fertilidad. Llegamos al final como unos campeones, desde arriba las vistas son alucinantes, nos hacemos el "Give me five" y a sacar fotos de todo aquello.
Y fotos era lo que querían hacerse con nosotros toda una familia que habían venido al Templo cuando bajábamos. Debíamos parecerles o extremadamente feos o extremadamente raros, sin parar de reírse y de agradecer nuestro detalle con ellos se hicieron un buen número de instantáneas.
Seguimos nuestro camino, ya de vuelta hasta el Templo Candi Sukuh. Este templo es increible, tiene forma de Piramide, contemporanea del Imperio Maya y construida de la misma manera, inusual en aquel tiempo. También nos costó la entrada 20.000 rupias.
Es por la tanto, uno de los templos más enigmáticos de isla de Java. Está dedicado a la fertilidad y la pirámide está completamente labrada, que tampoco era normal, ya que aquella época se esculpía.
El templo se encuentra actualmente en restauración, rodeado de andamios hechos de bambú. Nos impresionó la destreza de los obreros para prepararlos.
Esta imagen sacada de Google es la que esperábamos ver.
En una de las esquinas del recinto, hay un especie de altar con un falo de piedra, al que han tenido que poner una verja para que la gente deje de tocarlo. En la tienda de suvenires del recinto nos hizo gracia una camiseta con la leyenda "EROTIC TEMPLE". No había de nuestra talla.
Después de casi tres horas de viaje para cubrir 90 kilómetros por fin llegamos al hotel, pagamos los servicios de guía y conductor con una propina para cada uno y subimos a la sala "Level" donde nuevamente cenamos a base de caprichos.
Una ducha rápida y a darnos un masaje javanés de una hora para los dos y que nos salió gratis como ya os relatamos. Magnífico masaje que nos dejó nuevos. Rápidamente a cerrar maletas, al día siguiente marchábamos a Singapur.
